Comunidad Bahá'í de Valdivia

Principios Bahá’ís: La religión debe ser causa de amor, afecto y unión La religión debería unir a todos los corazones y hacer que las guerras y las disputas se desvanecieran de la faz de la tierra, dando nacimiento a la espiritualidad, confiriendo vida y luz a cada corazón. Si la religión se convierte en causa de aversión, de odio y de división, sería mejor no tener ninguna y apartarse de semejante religión sería un acto verdaderamente religioso.

martes, 27 de noviembre de 2007

La salud física y espiritual, artículo en el Diario Austral

Salud física y espiritual

Stéphanie Charvin

El ser humano es como un bosque: un conjunto de microcosmos en un macro, todos cumpliendo su propósito según la ley de la naturaleza mediante un complejo equilibrio. De esta forma, si algo cambia, aun si fuera un átomo, tendrá repercusión sobre todo el bosque. El hombre se ve enfrentado a situaciones frente a las cuales reacciona, y eso afecta su equilibrio emocional y físico; restablecerlo depende sólo de la fuerza mental y física de la propia persona, diferente en cada caso particular. Por lo mismo no existe una receta universal para la salud; pero sí principios básicos que se pueden aplicar, cada cual según su capacidad, necesidad, y sobre todo voluntad.

Contaban los antiguos indígenas norteamericanos que en cada uno de nosotros habitan dos lobos. El primero representa nuestra naturaleza inferior: ego, vanidades, odio. El segundo representa nuestra naturaleza superior: amor, nobleza, bondad. Ambos se enfrentan constantemente, y el victorioso será aquel que reciba más y mejor alimento. Entre los alimentos apropiados, uno de los más básicos es la correcta respiración. El aire es una energía vital para el organismo. La mejor respiración es la abdominal, con la cual se llenan los pulmones y el abdomen, inhalando por la nariz la misma cantidad de aire que se exhala. Si uno se siente con poca energía, ayuda inhalar más aire del que se exhala. El solo hecho de enderezarse amplía nuestra capacidad de respiración; se abre la caja toráxica, el estómago y el bazo tienen más espacio para cumplir con sus funciones, y así cambia además la actitud frente a la vida. Las personas que sufren de depresión suelen tener su espalda doblada, la cabeza baja, y la mayoría del tiempo no respiran de manera correcta.

No podemos separar el cuerpo del alma; por eso fortalecer y nutrir a uno tendrá consecuencias sobre el desarrollo del otro. ¿Pero cómo alimentamos nuestra alma? ‘Abdu’l-Bahá afirma que las mejores herramientas son “la oración, la meditación y el trabajo realizado en espíritu de servicio a la humanidad”.

Sin embargo, diariamente estamos expuestos a una serie de imágenes, palabras, colores, y en general al medio ambiente en que nos desarrollamos, todo lo cual pone dificultades adicionales. Todo eso lo “comemos”. Hay que tener cautela para evitar una indigestión de “chatarra”: violencia, corrupción, injusticias. Antes bien, conviene llenar nuestras mentes de pensamientos positivos que tengan un real efecto en la transformación global. Contrarrestar los pensamientos de odio por unos más fuertes de amor, y a un pensamiento de guerra oponerle uno más grande de paz.

sábado, 24 de noviembre de 2007

Una visita desde Ecuador

Tuvimos la suerte de tener la visita de Nadya Gharaei, una amiga bahá'í que está haciendo su año de servicio en Guayaquíl, Ecuador. Ella nos contó sobre su tiempo allá, acompañada por una presentación de fotos.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Conmemorando el Nacimiento del Báb

La celebración del Nacimiento del Báb se realizó la tarde del 19 de octubre, en la comunidad de Valdivia.

Para empezar, hubo oraciones y una presentación del coro de la comunidad
Luego, un grupo de títeres narró la vida del Báb



Para finalizar, un grupo de jóvenes interpretó una obra instrumental

Por supuesto, hubo comida





viernes, 9 de noviembre de 2007

Los principios bahá'ís, artículo en el Diario Austral

Los principios bahá’ís

Manuel Salvo

A mediados del siglo XIX, en Persia, un hombre conocido como Bahá’u’lláh declaró ser la más reciente Manifestación de Dios. Anunció que había llegado el momento en que la raza humana debía ser considerada como una sola, y que para que eso suceda es necesario atenerse a ciertos principios básicos:

- Unidad del género humano: “Todos los hombres sois hojas de un mismo árbol, flores de un mismo jardín, gotas de un mismo océano. Este puñado de polvo, la tierra, es un solo país y la humanidad sus ciudadanos.”
- Investigación independiente de la verdad: “El hombre debe desligarse de todo prejuicio. La Verdad es una en todas las religiones, y por medio de esta, la unidad del mundo puede realizarse.”
- Armonía entre ciencia y religión: “Si las creencias religiosas se estiman contrarias a las normas de la ciencia, no buscamos la Verdad.”
- La religión debe ser causa de unidad y armonía: Si la religión fuera causa de desunión, el acto más religioso sería no tener ninguna religión.
- Solución espiritual de los problemas económicos: “Los gobiernos deberían ceñirse a la Ley Divina, que brinda igualdad de Justicia para todos. Esta es la única manera de abolir lo superfluo de la riqueza exagerada, así como la pobreza desmoralizadora.”
- Abolición de todo prejuicio: Debe renunciarse a todos los prejuicios, así sean de religión, política, nacionalistas, de raza, etc. “Las flores de los altares son de muchas variedades, mas la adoración es una sola.”
- Educación universal: “Desde el comienzo, los niños deben recibir educación divina, y continuamente debe hacérseles recordar a su Dios.” Esta es la verdadera educación, ya que con su ayuda la naturaleza superior o espiritual del ser humano se desarrolla.
- Igualdad de derechos del hombre y la mujer: A los ojos de Dios ningún sexo es superior al otro.
- La base de todas las religiones es una: El reconocimiento de que todas las grandes religiones mundiales provienen de una misma Fuente y han sido las sucesivas etapas de la evolución espiritual del hombre.
- Adopción de un idioma universal, para facilitar la comunicación entre todos los pueblos de la Tierra.
- Creación de un tribunal internacional de justicia: “Si los gobiernos y reyes de la Tierra se levantan y resuelven dedicarse a aquello que promueva los más altos intereses de la humanidad, la justicia será establecida”
- Paz universal: “La paz no sólo es posible, sino inevitable”.

La invitación que la comunidad bahá’í extiende es a adherirse a estos principios básicos y hacerlos propios, para que cada uno de nosotros se transforme en un actor relevante que contribuya a alcanzar la paz universal.